Si escribes en el buscador “El sitio de mi Recreo” aparecen desde centros Juveniles, blogs, casas de turismo rural, proyectos de crowfunding. Pero si lo escribís en vuestra memoria solo hay un enlace destacado, en mayúsculas, cursiva, negrita y luces de neón (todo a la vez). La cumbre de la movida madrileña de los 80 (y eso que salió en 1992), la canción por excelencia que todos nos sabemos y tarareamos a coro cuando suena.
Como me ha ocurrido ya en varias ocasiones, con esta canción que da cosica de hoy, se han escrito cientos de miles de páginas, debates, y horas de televisión y radio. Para que engañarnos, esta me da cosica a mí y a todos aquellos de vosotros que tenéis más de treinta.
Creo que ya se ha escrito demasiado de esta canción, que si hablaba de la Heroína, que si Antonio desarrolla toda la poesía que llevaba dentro para dejarnos sin palabras, sus tortuosas metáforas, hacen que veamos, que lo que en un principio parece una canción sencilla y de apariencia frágil y simple se convierta en un acercamiento a nuestro rincón feliz. Ese, al que nos aconsejan los sabios, que vayamos a escondernos cuando todo va mal.
La voz desnuda, del que vivió años de prestado, nos sumerge en el mundo de los sueños y la magia. La voz del que siempre miraba al suelo cuando salía al escenario, nos teletransporta a esa tarde en Ibiza donde escribió la canción. En sus propias palabras: Es una canción paisajística, responde a un momento de inspiración en el que encuentras una secuencia que te lleva por un camino. Habla de los lugares donde uno se encuentra a gusto física y espiritualmente. Más que un lugar es un estado de consenso contigo mismo, un lugar no conflictivo.
Tras esta sentencia, todo lo que yo añada es superfluo, y vacío, solo puedo susurrar:
Donde nos llevó la imaginación,
donde con los ojos cerrados
se divisan infinitos campos.
donde se creó la primera luz
junto a la semilla de cielo azul
volveré a ese lugar donde nací.
De sol, espiga y deseo
son sus manos en mi pelo,
de nieve, huracán y abismos,
el sitio de mi recreo.
Viento que a su murmullo parece hablar
mueve el mundo con gracia, la ves bailar
y con él, el escenario de mi hogar.
Mar, bandeja de plata, mar infernal
es su temperamento natural,
poco o nada cuesta ser uno más.
De sol, espiga y deseo…
Silencio, brisa y cordura
dan aliento a mi locura,
hay nieve, hay fuego, hay deseo,
ahí donde me recreo
https://www.youtube.com/watch?v=Z-pgGawa1_o
Como siempre me ocurre unas canciones me llevan a otras, y el salto de hoy es más que evidente, del Sitio de mi Recreo solo podría volar al Rincón Exquisito, el mismo espiritu, la misma dulzura, los mismos caminos que se cruzan y se descruzan, el mismo escalofrío que recorre mi espalda cuando escucho el directo de Second en el Teatro Circo de Murcia.
¡Cuántas alegrías me está dando Murcia! ¡Murcia, que hermosa eres!
Fdo. Martirios Fuertes