Hacia ya algún tiempo que estaba deseando volver a contar cosas sobre canciones que me generan algo dentro, que me dan cosica, pero mi cuerpo y mi mente no estaban en la onda de poder desarrollar nada, hoy vuelvo a mis andadas, a diseccionar una canción que me toca las tripas, porque ya sabéis que a mi corazón llegan muchas cosas, pero a mis tripas llegan poquitas… Una de esas es ‘Los Años’, de Viva Suecia.
Cuando nos hacemos fuerte en algo, ya sea trabajo, o una relación, nos cuesta trabajo cambiar de hábitos, reconocer que algo va mal, no queremos ver que hemos fracasado, y la canción de hoy va de eso, de un fracaso que nadie quiere reconocer, somos así de ciegos. Es el miedo al cambio, a dar el salto, vemos que todo solo puede ir a peor y nos empeñamos en seguir alargando la situación.
Viva Suecia nos relata esto que estoy contando en su canción “Los Años” incluida en su Álbum de debut “La Fuerza Mayor”, producido por Paco Román en febrero de 2016. Este disco pareciera grabado en las frías estepas suecas, llenas de nieve, de desengaños, de sonidos shoegaze. Las guitarras de Alberto y Rafa con retroalimentación, ruidosas y a la vez melódicas, plagadas de pedales de efectos como el flanger, reverb o chorus, los ambientes espaciales del bajo de Jess y la Batería de Fer que crearon para nosotros, y sus letras, entre sombrías y melancólicas la mayor parte del tiempo susurradas. Paco Román deja su impronta y Viva Suecia, como los patos recién nacidos que persiguen a Konrad Lorenz, asumen que es su padre musical.
La huida hacia delante nunca ha servido para nada, y cuando Rafa Val nos susurra que las cosas se ponen mal, y que es momento de saltar del edificio en llamas, pero a ver quien es el valiente que lo hace primero, nos recorre el miedo por todo el cuerpo, ese miedo a la soledad del sofá, a la compra para uno, a las noches de cenar restos por no cocinar… (Empieza a estar, reñido abandonar el barco, anclados en el mismo charco de siempre. Y ahora que nos acogemos a sagrado nos llueven hostias por todos lados. De modo que si lo he llevado hasta el extremo es porque solo nos queremos lejos.) nos damos cuenta que el amor, ese de las películas romántico, hay veces (muchas) que no es suficiente. ¿Y llegados a este punto que? Pues el rencor, el odio, la inquina se hacen fuertes en nosotros, nos jodemos la vida y se la jodemos al otro, decimos cosas solo por hacer daño, mentimos, humillamos…(Con los años, lejos de aprender, nos apuñalamos, nos hacemos más extraños. Nos hacemos tanto daño)
Todos hacemos lo mismo, llegamos a ese punto en el que no reconocemos al otro, ni siquiera nos reconocemos a nosotros mismos, no somos capaces de saber que lo siguiente es la destrucción total, la bomba atómica que arrasará todo, no sabemos parar aunque sepamos lo que va a ocurrir, (Confía en mí: seremos carne de rutina, hasta llorar por las esquinas de siempre.).
Fdo.- Martirios Fuertes