Sansan Festival daba el pistoletazo de salida para la mayoría en lo que venimos llamando la Guerra de Festivales con tres días donde la plana mayor de la escena nacional desfiló por sus escenarios para el disfrute de los más de 30.000 asistentes que se dieron cita en esta primera edición.
Desde el jueves 17 al sábado 19 de abril pudimos asistir a un evento que deberá consolidarse en próximas ediciones, sobre todo si tenemos en cuenta el gran respaldo de público que provocó un ‘sold out’ el mismo sábado, día en el que aparecieron Izal, La Habitación Roja, Lori Meyers, Niño Burbuja, Dinero o Xoel López como protagonistas.
SanSan Festival abría puertas el jueves 17 con grandes nombres como reclamo y muchas ganas de fiesta que ni siquiera las difíciles condiciones de sonido tras la lluvia de la noche anterior que perjudicó notablemente el equipo pudieron quitar. Eso si, lo cierto es que el escenario de la piscina con nombres como Jack Knife, subieron mucho las acciones de rock y fiesta del festival con muchas dosis de energía y electricidad que, en el escenario principal, perdíamos por las dificultades técnicas que, a pesar de todo, no impidieron disfrutar de Maika Makovski y de las nuevas canciones de ‘El Futuro’, el nuevo trabajo que de forma magistral Niños Mutantes presentaron en el año en el que cumplen 20 años de carrera. Antes que Niños Mutantes aparecieron Second, cuyo directo crece día a día, plasmando un espectáculo plástico y estético cada vez más imprescindible. Y en el escenario principal también pudimos disfrutar de Love of Lesbian, de los que está dicho casi todo, pero que nunca defraudan y saben como hacer disfrutar al personal haciendo un repaso entre sus clásicos más coreados y las canciones que componen su último trabajo doble ‘La Noche Eterna. Los Días No Vividos’. ¿La guinda del jueves? El premio final lo ponían unos Fuel Fandango a los que esta misma temporada veremos como cabezas de cartel de festivales como Emdiv Music Festival y que de la mano de Ale Acosta y Nita arrancaron bailes y suspiros a partes iguales poniendo la banda sonora perfecta a una noche donde nos quedamos con las ganas de ver a ElyElla Djs.
El viernes comenzó soleado en SanSan Festival en el privilegiado entorno de Wonderwall donde los allí alojados podían disfrutar de djs y piscina desde primera hora de la mañana mientras nosotros nos acercábamos a la prueba de sonido de Amaral, intentando resolver los problemas de sonido que continuaban desde el día anterior. Y esa quizá es la única e importante pega que se le puede poner a esta edición de SanSan Festival. Y aunque sabemos que ante las inclemencias del tiempo poco se puede hacer, lo cierto es que seguro que para próximas ediciones los equipos estarán bien tapados, el escenario cubierto y se evitarán problemas de sonido y retrasos que tanto incomodaron a algunos asistentes, aunque otros, con muy buen humor, planteaban que para el año que viene simplemente pongan los grupos sin horarios y la gente disfrutará más sin saber que les espera. Pero vamos al viernes y a lo que sucedió con bandas como The Right Ons, puro rock en castellano con su último trabajo ‘Volcán’ sobre el escenario principal mientras que en el escenario piscina Carlos Sadness, Cyan y, sobre todo, Smile, ponían las dosis de fiesta, luces, color y felicidad necesarias para afrontar una jornada tan soleada que casi parecía verano.
Mientras en el escenario principal Iván Ferreiro se saltaba los retrasos y Varry Brava pasaban a cerrar el principal mientras el artista gallego, acompañado de toda su banda, incluido el gran Ricky Falkner, hacía un recorrido desde Val Miñor hasta Madrid, pasando por clásicos de Los Piratas a través de canciones que nos llevaban por el tiempo y la distancia.
Tras Iván Ferreiro, Eva Amaral y Juan Aguirre, con su impresionante banda, calentaban motores en el backstage con ganas de demostrar que se las saben todas y pueden con cualquier problema sonoro con clase y una sonrisa. Una lección magistral y de actitud para una banda que fue la gran sorpresa del cartel y que justificó sobradamente su presencia en SanSan Festival tirando de hits y presentando en directo temas tan polémicos como ‘Ratonera’, coreado desde la primera nota. Amaral pueden hacer lo que quieran, como quieran y cuando quieran y lo saben. Y eso hace que la comunión con su público sea total.
Tras Amaral le tocaba el turno a Miss Caffeina que se metieron al público en el bolsillo agradeciéndoles su presencia por los retrasos y regalando un concierto enérgico y potente como un gancho inesperado. Look, presencia, voz y talento. Lo tienen todo y en directo lo mejoran.
Tras ellos, por fin, Varry Brava con nueva formación, echamos de menos a los hermanos Gas, y presentando nuevos temas. Tres en concreto. Comienza una nueva etapa para Varry Brava y quizá la hora, la humedad y el retraso nos les benefició para empezarla pero aun así SanSan Festival vio como esta banda nunca defrauda y hace bailar al ritmo que ellos quieren. A partir de aquí solo les queda encajar piezas y rodarlas. Un buen broche para una difícil jornada.
El sábado amanecimos con los cambios de producción y un sonido muchísimo mejor como pudimos comprobar desde primera hora con la prueba de sonido de Lori Meyers. Nada que ver con lo vivido anteriormente. Ahora se escuchaba. Y además muy bien. Gran capacidad de reacción por parte de la organización del festival que buscó soluciones a cada instante ante cualquier eventualidad que pudieran tener lo que demuestra preocupación por su público y marca y mucha profesionalidad, como la que se vivió en el escenario piscina desde por la tarde con Napoleón Solo (están preparando nuevo trabajo), Novedades Carminha (pura electricidad), Mendetz (que clase) y la gran sorpresa, unos Niño Burbuja que reunieron más de 2000 personas y tuvieron espectáculo ¿espontáneo? de striptease incluido. Muy rock star todo.
Mientras en el principal la calidad de 84 era seguida por la elegancia de Julio de la Rosa, que a su vez daba paso al magnífico directo de La Habitación Roja (uno de los claros vencedores de esta edición de SanSan Festival) que conquistaron al público jugando en casa frente a unas amenazadoras nubes y un intenso viento que dotó incluso de algo de épica a su concierto. Tras los valencianos llegó el turno del gallego Xoel López, otro claro triunfador que se ganaba al público canción tras canción con una propuesta personal y la interacción de su estupenda banda convirtiendo casi cada tema en un momento inolvidable para los allí presentes. ‘Es muy bueno’ se escuchaba una y otra vez entre público y compañeros de profesión. Si. Lo es.
Y tras la sencilla y maravillosa actuación de Xoel López llegó la energía de la banda del momento, Izal. Los madrileños han caido de pie tras mucho trabajo y ahora mismo son como el Rey Midas, todo lo que tocan lo convierten en oro. Y hablamos de sus canciones, todo lo que tocan se convierte en oro musical, en canciones coreadas como una sola voz entre Mikel y el público, un viaje a través de un agujero de gusano lleno de magia y efectos especiales, una catarsis, una liberación de rabia contenida sacando a gritos cada asistente del público todo lo que lleva dentro a golpe de canción de Izal. Saben nadar y guardar la ropa. Y lo hacen, además, con una sonrisa. No existe la clave del éxito, pero Izal la han encontrado.
Y de Madrid a Granada sin movernos del Wonderwall en Gandia, o lo que es lo mismo, de Izal a Lori Meyers, que tiran de manual para dar clases maestras en cada uno de sus conciertos, este con recuerdo a Junior y a Gabriel García Márquez incluido. Noni, Alejandro, Alfredo y los suyos se trasforman en un huracán cuando suben al escenario, y cantan e interpretan, viven y sienten cada una de las notas y las letras que regalan al público. Sin trampa ni cartón. Un directo arrollador que alcanza el climax tras un ascenso continuado por temas como Luces de neón, Religión o Planilandia y que finaliza con Alta Fidelidad, Aha han vuelto, Luciérnagas y Mariposas o Emborracharme. Todas sus canciones son himnos. O casi. Les sobra clase y personalidad. Hay mucho de genio en sus canciones. Y además contaron con la maravillosa colaboración de Anni B Sweet.
Y tras Lori Meyers llegaba la dosis reglamentaria de rock a SanSan Festival: llegaba el turno de Dinero. Potencia como si te dieran un puñetazo directo al mentón. Golpe a golpe, canción a canción, como si fueran boxeadores profesionales y experimentados, Ekain, Rubi y Sean derribaron al público de SanSan Festival que coreaba antiguos temas y los nuevos como si los llevaran en su mp3 de toda la vida. Así hasta culminar todo en una fiesta con En Invierno y terminar viéndolos cerrar el escenario principal entre vítores y aplausos. Una guinda perfecta a la que siguió Amable con su maravillosa sesión.
Y de este modo se cerraron los tres primeros días de vida de SanSan Festival, una edición que demostraba mucha personalidad con una apuesta clara por el producto nacional en un entorno idílico, a la que se le puede poner el pero del sonido y retrasos (de todo se aprende como demostraron el mismo sábado) pero a la que hay que felicitar por la facilidad en el acceso (solo hubo colas el sábado), la versatilidad de las barras (rapidez), los puestos de comida y la comodidad de las zonas vip y supervip y de las zonas de trabajo (prensa, etc). Sin olvidar la maravillosa exposición de la SanSan Gallery. En resumen, un festival al que habrá que volver porque no nos queda duda que habrá nuevas ediciones. Ya tenemos el primer festival de la temporada para el futuro: SanSan Festival.
Estoy de acuerdo con que la organizacion fue genial, ni colas ni esperas y sin aglomeraciones. Pero las esperas de 45 minutos incluso el sábado y los problemas de sonido jueves y viernes hace que me piense si repetir. No se puede hacer esperar a la gente casi una hora para que los conciertos duren lo mismo que la espera. Espero qud solucionen esto en próximas ediciones. Gracias a los grupos por otro lado por los momentazos del festival.