Las drogas son malas y hay vidas que parecen escritas de antemano, que se repiten como corrientes circulares en el tiempo, que dan la vuelta hasta volver al mismo punto.
En el año 2000, Paula Yates (presentadora de TV) fallecía a causa de una sobredosis accidental de heroína. Fue encontrada sola con su hija pequeña, Tiger Lily, que por entonces tenía cuatro años. Catorce años después la historia se repite con la hija de Paula Yates, Peaches Geldof, también presentadora de televisión (y modelo, y escritora), que aparecía muerta el pasado 7 de abril, parece que por consumo de heroína, también con su hijo pequeño (Phaedra, de 11 meses) en casa.
Peaches Geldof era toda una celebridad. Hija del músico Bob Geldof y de la presentadora de televisión Paula Yates, y a su vez casada con el también músico Thomas Cohen, del grupo Scum. Lo tenía todo para estar cada día y cada hora en las revistas del corazón. También, en apariencia, lo tenía todo para ser feliz. Pero nos encontramos con otro juguete roto. En su casa no hubo evidencia de drogas, parece que estaba recibiendo tratamiento con metadona y ahora hay investigación en curso para saber quien le pasaba la droga. Deja dos hijos. Vive rápido, vive deprisa y deja un cadáver bonito.